Fuente: Equipo de Prensa ~Palacio San José ~
Se encuentra una caja invaluable con moldes de las guardas pintadas que embellecen las paredes de la residencia del general Urquiza y su esposa Dolores Costa que servirán para el proyecto de restauración integral.
Hacia junio del 2022, Guillermina Bevacqua asumió la dirección del Palacio San José con el obstinado compromiso de llevar adelante la tan necesaria, y hoy urgente, restauración del museo. Para la tarea, convocó al ingeniero Ruben Delsart, con extensa trayectoria en gestión de obras públicas, quien conformó un equipo de especialistas de la provincia especializados en patrimonio edilicio. El proyecto de restauración fue elaborado por el Arq. Rubén Castello, Javier García y Romina Pontelli. Para la ejecución de las obras, se asignaron 200 millones en el Presupuesto de Administración Pública Nacional 2023. En el mes de julio del mismo año, el Proyecto de Restauración integral – Etapa I fue aprobado por la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos. Para desarrollar el mismo, se firmó un convenio entre el Ministerio de Cultura de Nación y el Gobierno de la Provincia de Entre Ríos y, mediante la Ley N° 11.125 de presupuesto provincial 2024, se aprobó un monto de $500.000.000, en la jurisdicción del Ministerio de Planeamiento, Infraestructura y servicios de Entre Ríos para la ejecución de las obras. No obstante, actualmente, bajo el Nro. de Expediente: 2923191, el proyecto de «RESTAURACIÓN Y PUESTA EN VALOR «PALACIO SAN JOSÉ» – ETAPA 1 – SAN JUSTO – DEPARTAMENTO URUGUAY», espera que el gobierno de Rogelio Frigerio retome la tramitación de este expediente, cuyo último movimiento data del 27 de noviembre del 2023.
Si bien en la extensión de un párrafo se pueden resumir las acciones realizadas y el estado de situación que la gestión de la Dra. Bevacqua logró en un corto periodo, el trabajo fue arduo y constó de una labor en la que se contemplaron distintas acciones. Entre ellas, el equipo de Restauración desarrolló investigaciones sobre las intervenciones del edificio, dando cuenta de la complejidad de la tarea al no contar con un archivo unificado de las intervenciones realizadas en el Palacio San José. Como toda tarea de investigación que disponga de ella, la pesquisa también contempló el relato oral. En este caso, de Don Miguel Sosa, un agente de la Zonal de Arquitectura de Nación que se desempeñó como integrante de la cuadrilla entre 1961 – 1994, último año en la que esta interviene en el edificio histórico. El testimonio de Miguel Sosa fue esencial para dar cuenta de las intervenciones realizadas, completando su relato allí donde el documento histórico se encuentra ausente o no logra traducir al presente la totalidad del acontecimiento.
Pocos días atrás, Don Sosa fue convocado nuevamente al Palacio San José, esta vez, para registrar su valioso relato en un micro documental dirigido por el cineasta Guillermo Berger sobre la restauración del museo. En aquella oportunidad, Sosa mencionó: “Yo dejé una caja en Arquitectura”. Entonces, Guillermina Bevacqua advirtió la importancia de aquella caja que le habían ofrecido y que estaba guardada desde el cierre de la ex zonal de arquitectura. El hallazgo de esta caja significa un aporte para la restauración del Palacio ya que contiene moldes de las pinturas (las guardas fileteadas) del Palacio San José. Si bien sobre estas no existe información precisa, en el acervo del museo, sus documentos indican que hacia 1889 se realizaron: “Pagos o convenio entre José Ballestrin y Andrés y Julio Cometa por trabajos en cielorraso, empapelados, pintura y fileteados de cornisa, pintura de las paredes color granate, pinturas de las puertas de blanco con barniz, fileteado de bronce por dentro (…)” (en Delzart y Gradizuela, en prensa). Por su parte, Antonio Castro, primer administrador del Museo, al describir el edificio hacia 1944, indica que, en la entrada, el amplio hall de ingreso entre el Escritorio político y el Salón de los Espejos, poseía “artísticas molduras de material y que estuvo pintado al óleo de color rojo-pompeyano y guardas terracota”. Don Sosa cuenta que en su infancia realizó una visita junto a su escuela y observó cómo una persona se encontraba trabajando en estas pinturas. Tras su pequeña curiosidad, el pintor le contó la tarea que estaba realizando. Paradojas de la historia, fue el mismo Sosa quien se desempeñó años después como pintor en el museo.
Estos moldes, tipo esténcil, ingresaran al acervo del Palacio San José, incrementando su colección, dando cuenta que el museo no solo preserva piezas de importante valor histórico del s. XIX, sino también resguarda objetos y documentos que constituyen la historia de la institución. De este modo, la gestión de la Dra. Bevacqua, finaliza rescatando y dando cuenta de una historia que no cesa de escribirse en el Palacio San José.